^_^ Si nuestro nacimiento hubiera cambiado...

Ya en la década de los 70, se comienza a escuchar la melodía un parto menos violento:

 

En 1976 el Doctor Frédérick Leboyer sorprende al mundo de la medicina al ser el primero en hablar del parto desde el punto de vista del bebé con su libro “Por un Nacimiento sin violencia”.

“Si nuestro nacimiento hubiera cambiado, es decir, si hubiéramos sido recibidos, conocidos como debe ser, NO como Objetos sino como Seres Humanos, todo el desarrollo de nuestra vida hubiera cambiado” (Frederick Leboyer).

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Y cerca de 40 años más tarde, la melodía de un parto más natural, sigue sonando con más fuerza que nunca: de la mano del Doctor Michel Odent. Os diré cómo lo conocí...

10:05 de una mañana de un 23 de mayo, Madrid. Amanece una mañana gélida en Madrid, pero este curso va a cambiar al menos una vida, la mia! ;)

Se abre el telón. Aparece una de las personas más sabias del planeta entorno al nacimiento: Michel Odent. A sus 84 años, conserva una mirada de "niño inquieto", ávido de descubrir y de comunicar los últimos descubrimientos científicos alrededor del embarazo, el parto y el primer año de vida del bebé. Sus palabras, su ímpetu, su mirada inquieta... en suma emocionan y contagian... Fue él, quien también en la misma década de los 70, introdujo los conceptos de "sala de partos como en casa" y "piscinas para partos" en las maternidades del hospital. Fue el primer autor en escribir sobre la iniciación a la lactancia materna durante la siguiente hora al nacimiento. Y a día de hoy, sigue investigando, publicando libros y artículos científicos y viajando por todo el mundo, comunicando sus hallazgos en una dilatada trayectoria profesional que acumula cerca de 50 años como cirujano y ginecólogo.

Varios son sus mensajes, rescato estos dos de su libro El Bebé es Un Mamífero: 

- "Hay que volver al punto de partida y recordar que, por encima de todo, somos mamíferos"
 

- "Ahora, la superviviencia del planeta ha pasado a un primer plano, y esto significa que tenemos que replanteárnoslo todo"
 

Estos y otros mensajes,  señalan entre otras cuestiones a la importancia de mantener un parto lo menos medicalizado y menos "socializado" posible.